Escuela Shakuhachi Chile: El Camino de la Flauta Zen Japonesa
De todas las milenarias y fascinantes manifestaciones artístico - religiosas de la cultura nipona, el suizen es quizás la disciplina que más desconocemos. En Chile, sin embargo, nadie podría imaginar que existe una escuela que desde hace ya diez años se dedica a la interpretación de la flauta japonesa shakuhachi, y con ello al ejercicio de la meditación suizen.
Esta práctica de meditación con música (suizen- zen soplado), desarrollada en el siglo XVI por los monjes budistas zen japoneses Komuso (monjes del vacío y la nada) se fundamenta en la idea de alcanzar la iluminación (Satori) tocando la flauta de bambú, no como instrumento musical, sino como herramienta de práctica religiosa. Los Komuso decían "ichi on jobutsu": alcanzar la iluminación en un sonido.
Nuestra cultura occidental, sin embargo, necesita contextualizar este tipo de disciplinas, puesto que la sola idea de "tocar un instrumento desde la no mente" nos parece casi imposible. La Escuela Shakuhachi Chile es, hasta el momento, el primer y único espacio de acercamiento a la meditación suizen y la ejecución de la flauta zen japonesa en nuestro país. Con una metodología adaptada a las condiciones de nuestra cotidiana realidad, nos hemos echado a este camino del zen, con la mente atenta al sentido original que tiene esta práctica, porque entendemos que las fronteras, tanto geográficas como culturales y temporales, no pueden impedir la experiencia del encuentro del alma con el hermoso sonido del shakuhachi.
La tradicional escuela del gran maestro japonés Katsuya Yokohama, ha sido la fuente de constante estudio para alcanzar las competencias necesarias, tanto en la ejecución del instrumento como en la práctica del suizen.
Nuestra metodología se basa en la interpretación de variaciones e improvisaciones sobre los modos característicos y giros melódicos propios del repertorio Honkyoku de los monjes. En cada sesión incluimos también el ejercicio de la meditación suizen.
En veinte años de estudio personal y ejecución del shakuhachi, de los cuales diez he dedicado a la formación de la Escuela en Chile, como profesor y maestro de flauta zen japonesa, he podido realizar la difusión de esta milenaria disciplina en forma particular, y también a través del mundo académico: en la Universidad, en Institutos culturales y diversas actividades relacionadas con la cultura japonesa en Chile, así como también en presentaciones solistas y grupales para programas, seminarios, conciertos didácticos, charlas y exposiciones de música y sonoterapia.
Sin duda, la alternativa de la meditación como complemento en la búsqueda de una mejor calidad de vida se ha hecho mucho más presente, no sólo entre los amantes de la cultura japonesa, sino entre quienes comprenden que vaciar el cuenco de la mente es mucho más saludable que rebasarlo con la ilusión del mundo material. En virtud de esto, una práctica que contiene la belleza del sonido del shakuhachi, y el rigor en el estudio de su ejecución, fortalece el equilibrio entre el cuerpo la mente y el alma para el auto conocimiento y desarrollo integral.
La Escuela Shakuhachi Chile recoge la impronta de esta cultura sacra, contextualizando sus fundamentos para aportar no solo a la difusión, sino también al acercamiento de la experiencia de tocar, o simplemente escuchar en vivo, aquí y ahora, "el espíritu del viento entre las hojas del bambú".
Francisco López Silva
Músico terapeuta
Profesor y maestro de flauta zen japonesa Shakuhachi